martes, 30 de julio de 2019

LA FLOR DOLIENTE Y LA DIÁSPORA EXPECTANTE


Shirley Arnao -Shishi.
La flor doliente y la diáspora expectante.
Chimó, clorofila y azafrán sobre papel Fabriano.
0,70 x 1 mt.
2019.

La flor doliente y la diáspora expectante


Caminantes de nuevos rumbos, 
andantes de mil caminos,
redibujan su destino
y se esparcen por el mundo. 
Como astros vagabundos
inundan cielos lejanos, 
¡migrantes venezolanos! 
con un dolor muy profundo. 

Dejan atrás sus huertos, 
sus terruños, sus amores, 
y empacados mil temores 
llevan también un desierto. 
Les espera un norte incierto, 
vacíos van sus regazos;
hijos vivos, hijos muertos,
imposible es ya un abrazo.

¿Dónde queda la patria y su flor? 
¿Dónde yace el valor de su escudo? 
¿Cuánto más su pecho desnudo
herirá el puñal agresor? 
Más allá de todo el dolor, 
la añoranza y el sufrimiento, 
llegará un día el momento 
de retornar al amor. 

Cuando cada migrante vuelva
de su admirable campaña, 
lo estará esperando su selva, 
su valle, su mar, su montaña. 
Lo estará esperando su río, 
su llano, su fiel sabana,
la orquídea sobreviviente
que sueña un mejor mañana.

Convirtiendo el duelo en gloria, 
con un nuevo pensamiento, 
el más puro sentimiento 
cambiará nuestra historia. 
Y la diáspora en victoria 
volverá al tocar la diana 
para hacer nuevas memorias... 
¡en tierra venezolana!

                                Shirley Arnao.